El ministro de Interior tunecino es destituido por las revueltas que asolan el país
El primer ministro del país ha anunciado que el presidente, Zine al Abidine Ben Ali, ha nombrado un nuevo ministro. También ha ordenado la puesta en libertad de los detenidos durante las protestas de los últimos días en Túnez que se han saldado con 23 muertos, según datos oficiales.
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| Manifestantes trasladan a un herido en un encuentro con la Policía. Reuters http://www.elpais.com/fotografia/internacional/Varios/manifestantes/ trasladan/hombros/hombre/Tunez/elpdiaint/20110110elpepiint_7/Ies/ |
Los enfrentamientos han llegado a la capital y el Ejército se ha desplegado esta mañana por el centro de la ciudad. La oposición denuncia que la cifra de muertos asciende a las 50 personas y afirma que seguidores del partido del presidente provocaron los choques violentos en Kaserine, donde murieron al menos cuatro civiles en la madrugada de ayer, según cifras oficiales. La cadena de televisión Al Jazeera informaba anoche de que en los suburbios de la capital se habían asaltado un banco y saqueado numerosos comercios del barrio obrero de Ettadamen.
Los disturbios estallaron en Túnez el 17 de diciembre. Un joven se quemó en la localidad de Sidi Bouzid como denuncia después de que la policía le confiscara las frutas y legumbres que vendía de manera ambulante. Las fuerzas de seguridad argumentaron que carecía de permiso para la actividad.
El presidente de Túnez, Zine Abidine Ben Ali, compareció este lunes ante las cámaras en un intento por aliviar la mayor oleada de protestas que vive el país desde que su actual dirigente llegara al poder, hace 24 años. Prometió la creación de 300.000 empleos para los jóvenes, a la vez que denunció los “actos terroristas imperdonables”. Según el ministro de Comunicación, Samir Labidi, la Policía "no ha disparado jamás contra los manifestantes y los muertos se han producido a causa de los ataques y actos de vandalismo perpetrados contra edificios públicos por bandas de jóvenes con el rostro oculto".
Estas declaraciones, provocaron una nueva explosión de violencia en Kasserine, Thala y Regueb, el epicentro de las protestas junto con Sidi Bouzid. Los enfrentamientos se propagaron a Sfax, segunda ciudad del país y paralizada por una huelga general, y Souss y Bizerta, donde los estudiantes se enfrentaron a las fuerzas de seguridad del país.
Para evitar que se reproduzcan estos encuentros, el Ministerio de Educación anunció el mismo lunes por la noche el cierre de las instituciones de enseñanza en Túnez. Debido a las protestas, en algunas regiones se ha declarado recientemente el toque de queda y los militares han llenado las calles.
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